Tenía ganas de hacer por primera vez en casa esta receta tan famosa en Inglaterra. Se trata de una galleta densa que se caracteriza por esta corteza dura en su exterior, su interior abizcochado y su característico pliegue.

Acostumbran a comerse partidos por la mitad y untados con mantequilla y mermelada para un rico desayuno o disfrutar del famoso afternoon tea. En mi caso he decidido darle el toque dulce añadiendo una glasa real por encima además de darles forma cuadrada a diferencia de las formas más comunes como puede ser la redonda o la triangular.

INGREDIENTES:

• 400 g Harina Floja
• 100 g Mantequilla
• 60 g Azúcar
• 20 g Levadura en polvo
• 5 g Sal
• 1 Huevo
• 60 g Yogurt Natural
• 150 g Nata líquida

PASOS

1.Mezclamos todos los ingredientes, inciso, la mantequilla debe estar fría.

2.Cuando todos se haya integrado, dejamos de amasar, no nos interesa amasar mucho ya que desarrollaría mucho gluten y no nos interesa.

3.Vamos a estirar la masa hasta obtener un grosor de 1 cm.

4.Luego la debemos doblar por la mitad.

5.Seguidamente, troquelamos con un cortamoldes, yo he usado uno cuadrado, pero puede ser redondo y si no tienes cortamolde, puedes hacer un círculo y cortar con cuchillos en forma triangular  como si de una pizza se tratara.

6.Disponemos los scones encima de una superficie apta forrada con papel de horno y los pintamos con una mezcla de yema y nata líquida (200 g yema + 50 g nata).

7.Los horneamos a 180C calor superior e inferior durante 15-17 minutos.

CONSEJOS

Yo los decoré con mi toqué personal, una glasa a base de azúcar glas y agua teñida de rosa y unos sprinkles.